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Archive for March, 2020

(Declaración en Español aquí)

The Minnesota Immigrant Rights Action Committee (MIRAC) [and the Interfaith Coalition on Immigration (ICOM) stand for legalization and full equality for all people regardless of immigration status. The need for full equality has never been clearer than in the face of a global pandemic that doesn’t care about borders, nationality or race. The government must either choose immediate universal public health and safety measures for all, or coronavirus for all.

With the goal of ensuring the health, safety and economic well being of everyone in Minnesota during this crisis we demand:

  • We call for an immediate halt to all immigration enforcement operations by ICE and related agencies.
  • That all levels of government move to provide immigrants the same level of services that is afforded to any other resident and immediately implement universal free access to all health and medical needs
  • That a universal moratorium be implemented on reprisals for inability to pay for housing and basic services and utilities. These should be truly universal – regardless of immigration status.

Putting more people into jails and prisons right now where the virus can spread like wildfire is a terrible idea. Even ICE officers and several DHS officers have now tested positive for Covid-19, which adds to the risk of spreading the virus in detention centers. Toward the goal of reducing the hazard of mass infections in jails, prisons, courts and refugee camps, we also call for:

  • Elimination of ICE check-ins and mandatory court appearances.
  • That all immigrant detainees in Minnesota be tested for Covid-19.
  • That all detainees who test positive receive free and proper medical treatment.
  • That all detainees who don’t test positive be released.
  • That the transfer of immigrants to different jails and camps be stopped.
  • That border camps be closed and all detainees held in them be released.
  • That the “Remain in Mexico” policies that have left 60,000 families stranded in crowded, unsanitary encampments on the Mexico side of the border be stopped.

The public health measures necessary to combat the virus are creating major disruptions to the economy and people’s jobs. Many immigrants are concentrated in the lowest sectors of the economy with few job protections and benefits, with little in the way of sick and vacation leave, and with very limited ability to participate in what still exists of the social safety net. For immigrant workers, we demand:

  • That all people who were employed in the U.S. before the COVID-19 crisis and are suffering loss of income through layoff or reduced hours, be included in any relief programs, aid or stimulus checks, regardless of immigration status.
  • That all workers who are able to work remotely be allowed to do so in order to slow the spread of the virus.
  • That any workers who must continue to report to work because their duties are essential must be given proper protective equipment and that their working conditions be made as safe as possible.
  • That anyone who does not report to work due to feeling sick or testing positive for COVID-19 should face no reprisals, no loss of job and no loss of vacation or sick leave for following the recommendations of the WHO, CDC or MDH to socially isolate to contain the spread of the virus.

In addition, we call on elected officials at all levels of government to speak out and take action against the racist and xenophobic targeting of Chinese people and all Asian Americans and Pacific Islanders. The president himself has engaged in this racism. This is not a “Chinese virus”. Viruses don’t have a race or nationality and calling it that is racist scapegoating that has already provoked many cases of discrimination and even violent assaults against Asian Americans. Politicians and all people of conscience must boldly speak out and condemn such discrimination and attacks as well as condemning attempts to characterize COVID-19 in racial or national terms.

These are our currently-identified immediate pressing demands. We will raise new demands as the situation develops and new issues emerge.

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(Statement in English here)

El Comité de Acción por los Derechos de los Inmigrantes de Minnesota (MIRAC) y la Coalición Interfe sobre Inmigración (ICOM) apoyan la legalización e igualdad total para todas las personas, independientemente de su estatus migratorio. La necesidad de igualdad plena nunca ha sido más clara que frente a una pandemia mundial que no le importan las fronteras, la nacionalidad o la raza. El gobierno debe elegir medidas inmediatas de salud pública y seguridad públicas universales para todos, o va a ser el coronavirus para todos.

Con el objetivo de garantizar la salud, la seguridad y el bienestar económico de todos en Minnesota durante esta crisis, exigimos:

  • Pedimos que se paren de inmediato todas las operaciones de aplicación de la ley de inmigración por parte de ICE y agencias relacionadas.
  • Que todos los niveles del gobierno se muevan para proporcionar a los inmigrantes el mismo nivel de servicios que se presta a cualquier otro residente y que se implemente el acceso gratuito universal a todas las necesidades médicas y de salud inmediatamente.
  • Que se implemente una moratoria universal en las represalias por incapacidad para pagar la vivienda y los servicios básicos y servicios públicos. Estos deben ser verdaderamente universales – independientemente del estatus migratorio.

Poner a más personas en las cárceles y prisiones en este momento donde el virus puede dispersarse como un incendio forestal es una idea terrible. Incluso oficiales de ICE y varios oficiales de DHS han probado positivo para Covid-19, lo que suma el riesgo de dispersión del virus en los centros de detención. Hacia el objetivo de reducir el peligro de infecciones masivas en las cárceles, las prisiones, las cortes y los campos de refugiados, también pedimos:

  • Eliminación de visitas de ICE y las apariencias obligatorias en la corte.
  • Que todos los detenidos inmigrantes en Minnesota sean examinados para Covid-19.
  • Que todos los detenidos que dan positivo reciban tratamiento médico gratuito y adecuado.
  • Que todos los detenidos que no dan positivo sean liberados.
  • Que se detenga el traslado de inmigrantes a diferentes cárceles y campamentos.
  • Que se cierren los campamentos fronterizos y que todos los detenidos que se encuentren en ellos sean puestos en libertad.
  • Que se detengan las políticas de “Permanecer en México” que han dejado a 60,000 familias en campamentos sobre llenos e insalubres en el lado mexicano de la frontera.

Las medidas de salud pública necesarias para combatir el virus están creando perturbaciones mayores en la economía y en el trabajo de las personas. Muchos inmigrantes se concentran en los sectores más bajos de la economía con pocas protecciones y beneficios laborales, con pocas vacaciones de enfermedad y vacaciones generales, y con capacidad muy limitada para participar en lo que todavía existe de la red de seguridad social. Para los trabajadores inmigrantes, exigimos:

  • Que todas las personas que estaban empleadas en los EE.UU. antes de la crisis COVID-19 y están sufriendo pérdida de ingresos a través del despido o la reducción de horas, sean incluidas en cualquier programa de alivio, ayuda o cheques de estímulo, independientemente de su estatus migratorio.
  • Que se permita a todos los trabajadores que puedan trabajar de forma remota para reducir el disperse del virus.
  • Que cualquier trabajador que deba seguir reportándose a trabajar porque sus deberes son esenciales debe recibir el equipo de protección adecuado y que sus condiciones de trabajo sean las más seguras posibles.
  • Que cualquier persona que no se reporte al trabajo debido a sentirse enfermo o dar positivo para COVID-19 no debe sufrir represalias o pérdida de su trabajo, o pérdida de  su tiempo acumulado para vacaciones o enfermedades por seguir las recomendaciones de la WHO, CDC o MDH de aislarse socialmente para contener el disperse del virus

Además, hacemos un llamamiento a los funcionarios electos de todos los niveles de gobierno para que se pronuncien y tomen medidas contra los ataques racistas y xenófobos hacia la gente china, los Asiáticos-Americanos y los de las islas del Pacífico. El propio presidente del país ha hecho este racismo. Esto no es un “virus Chino”. Los virus no tienen ninguna raza o nacionalidad y llamarlo así es una excusa racista que ya ha provocado muchos casos de discriminación e incluso ataques violentos contra Asiático-Americanos. Los políticos y todas las personas de conciencia deben expresar y condenar con valentía estos ataques y discriminación, así como condenar los intentos de caracterizar a COVID-19 en términos raciales o nacionales.

Estas son nuestras demandas urgentes inmediatas actualmente-identificadas. Levantaremos nuevas demandas a medida que se desarrolle la situación y surjan nuevas cuestiones.

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